
ESTEBAN DE ANTUÑANO
Por Eugenio Trincado
Fue el mecanizador de la industria poblana. Industrial y economista nació en el puerto de Veracruz. Hijo de familia española, se educó en España en una población fabril de la Vascongadas; sin embargo trabajó en Puebla y fue el precursor de la industria en México por sus fábricas textiles, instaladas a la orilla del Rio Atoyac.
Por esa razón, viajó a Francia de 1830 a 1832 para aprender el proceso industrial correcto y hacer negocios con empresarios galos.
El proyecto industrial de Antuñano vio luz cuando, en 1835, comenzaron a funcionar las fábricas “La Constancia Mexicana” y “La Economía Mexicana”.
Las fábricas se instalaron en la antigua hacienda La Constancia “porque en ese sitio, el rio Atoyac tiene una fuerte corriente, es decir, la condición necesaria para trabajar por medio de la energía hidráulica.
En sus inicios, “La Constancia Mexicana” tuvo de 80 a 100 trabajadores; sin embargo, los avances de la tecnológica hicieron posible que hubiera mucho más mano de obra ocupada a la que siempre trató con criterios altamente humanísticos.
En 1877 el representante del Club de la Industria del estado de Puebla, declaró que los dueños de las fabricas tomaron por modelo “la justa y prudente” administración legada por Esteban de Antuñano.
Así mismo El Congreso del Estado Libre y Soberano de Puebla, decretó que se declaraba ilustre fundador de la industria fabril de la República y benemérito del Estado, al Coronel Esteban de Antuñano.
Su bibliografía económica, la más importante en la primera mitad del siglo pasado, comprende más de veinticinco obras científicas breves (opúsculos) indispensables para el conocimiento del pensamiento económico de la época.
En el fondo de la ofrenda instalada en el Centro de Convenciones de la ciudad se representa la entrada principal de “La Constancia Mexicana” sede hoy en día de la Orquesta Esperanza Azteca del Estado de Puebla.


